Los tirailleurs senegaleses ( tirailleurs Sénégalais) fueron un cuerpo colonial de infantería del Ejército Francés recrutados en Senegal, África Occidental Francesa y en toto el África occidental, central y del este, zonas principales del Imperio colonial francés. El nombre tirailleur, traducido como «hostigador», era una designación dada por el Ejército Francés a la infantería local o indígena reclutada en las diferentes colonias y posesiones de ultramar del Imperio Francés durante los siglos XIX y XX.
Aunque el reclutamiento no se limitaba a Senegal, estas unidades de infantería tomaron el adjetivo «senegalés» en su nombre dado que fue en este país donde se formó el primer regimiento negro de Tirailleur Africanos. Los primeros tirailleurs senegaleses fueron formados en 1857 y sirvieron a Francia en numerosas guerras, incluidas la Primera Guerra Mundial(proveyendo 200.000 tropas, más de 135.000 de los cuales lucharon en Europa y 30.000 de los cuales murieron), y la Segunda Guerra Mundial.
Ellos solo quieran cobrar
La masacre de Thiaroye sucedió en la localidad del mismo nombre de Senegal el 1 de diciembre de 1944 cuando gendarmes franceses, reforzados por tropas coloniales, dispararon sobre tirailleurs senegaleses recientemente desmovilizados, que en su mayoría eran a su vez antiguos prisioneros de guerra, quienes se manifestaban para reclamar el pago de lo que el ejército francés les debía. Como resultado, 35 tirailleurs fueron asesinados y 34 fueron condenados a prisión.
Al finalizar la Segunda Guerra Mundial en noviembre de 1944, alrededor de 1.280 soldados tirailleurs senegaleses o soldados de infantería senegaleses, fueron reagrupados en un campo de tránsito a una quincena de kilómetros del centro de Dakar. Estas tropas habían afrontado la ofensiva alemana de mayo a junio de 1940 en primera línea de fuego . Algunos tirailleurs, hechos prisioneros o heridos, llegaron a ser masacrados por las tropas de élite del Reich. Después de este periplo, se les mantuvo en cautividad en Francia, contrariamente a los demás prisioneros de guerra franceses enviados a Alemania, dado que el régimen nazi rechazaba tenerlos en territorio del Reich. Fueron utilizados como mano de obra forzada, en contra de los Convenios de Ginebra.
Cuando la Segunda Guerra Mundial terminó, estuvieron entre los primeros prisioneros en ser liberados, decidiéndose su desmovilizacion . Tras este proceso, los soldados esperaban cobrar un peculio formado por sus pagos atrasados que debería haberse ingresado antes de embarcarse para el continente.
En lugar de llevar a cabo la anterior regularización de las cantidades que les eran debidas en Francia, el Ministro de las Colonias les prometió ser desmovilizados a Dakar, donde llegaron el 21 de noviembre de 1944. Sin embargo, los pagos relativos a la desmovilización no tuvieron lugar. Por este motivo, un grupo que debía haber sido enviado a Bamako refusó de partir, lo que provocó la visita del General Dagnan, el 28 de noviembre. Los tirailleurs, reivindicando lo que les debían, empezaron una protesta. Consternado, el general consideró incluso haber estado muy cerca de haber sido secuestrado .
Dagnan tomó la decisión de realizar una demostración de fuerza, de acuerdo con su superior . Dagan volvió a acudir al campo acompañado por gendarmes, reforzados del sexto regimiento de artillería colonial, y apoyados por varios blindados. Tras dos horas y media de discusión, ordenó abrir fuego, lo que causó treinta y cinco muertos y otros tantos heridos graves, además de cientos de heridos leves.
Acto seguido, trescientos ex-tirailleurs fueron extraidos del campo para ser enviados a Bamako. Treinta y cuatro supervivientes, considerados como instigadores de la revuelta, fueron condenados a penas de uno a diez años de prisión. Además, se les condenó a una multa de 100 francos de la época y a la pérdida de sus derechos de indemnización por desmovilización. Fueron indultados en junio de 1947, durante la visita a Dakar de Vincent Auriol, Presidente de la República, pero no recuperaron sus derechos a disponer de una pensión militar.
Esta masacre provocó una toma de conciencia sobre el estado de desigualdad profunda en el que la colonización mantenía a las poblaciones locales. Su recuerdo ha permanecido vívido desde entonces. En agosto de 2004, el día del 23 de agosto fue declarado «día del tirailleur senegalés» por Senegal, invitando a otros estados africanos de origen de los tirailleurs a sumarse a esta efeméride. La masacre de Thiaroye es conmemorada ese día desde entonces.
Fuente: Wikipedia