Francis Williams fue elegido como objeto de un experimento social para demostrar que las personas negras con la educación adecuada podrían tener los niveles intelectuales que los blancos.
Francis Williams nació alrededor de 1700 de un matrimonio negro libre en Jamaica John y Dorothy Williams. John Williams había sido liberados por la voluntad de su antiguo amo. En menos de diez años, la familia Williams fue capaz de adquirir bienes. Como negros libres, la familia Williams han tenido la posibilidad de tener riqueza en la industria azucarera de Jamaica. Lo que era menos comunes es que fueron negros educados y la riqueza de John Williams aseguró que Francisco y sus hermanos recibieron una educación.
Pero la historia Francis Williams empezó cuando fue elegido como objeto de un experimento social ideado por el Duque de Montagu que deseaba demostrar que las personas negras – con la educación adecuada – podrían tener los niveles intelectuales que los blancos. El Duque avaló del viaje de Francis a Inglaterra por su educación en gramaría inglés, en una escuela primaria y luego en la Universidad de Cambridge. Sin embargo, Francis no aparece en los registros de la universidad.
En 1753, David Hume, reconocido como uno de los héroes filosóficos de la Ilustración y un enemigo acérrimo del prejuicio y la intolerancia, introdujo una nota de pie de página al ensayo De los caracteres nacionales, que había publicado en 1748, como respuesta, al menos de facto, al Espíritu de las leyes de Montesquieu. En esta nota, insertada en un momento cúspide del tráfico transatlántico de esclavos, Hume escribió:
“Sospecho que los negros y en general todas las otras especies de hombres (de las que hay unas cuatro o cinco clases), son naturalmente inferiores a los blancos. Nunca hubo una nación civilizada que no tuviera la tez blanca, ni individuos eminentes en la acción o la especulación. No han creado ingeniosas manufacturas, ni artes, ni ciencias… Tal diferencia uniforme y constante no podría ocurrir en tantos países y edades si la naturaleza no hubiese hecho una distinción original entre estas clases de hombre. Para no mencionar nuestras colonias, hay esclavos negros dispersados por toda Europa, de los cuales no se ha descubierto ningún síntoma de ingenio; mientras que la gente pobre, sin educación, se establece entre nosotros y se distinguen en todas las profesiones. En Jamaica, sin embargo, se habla de un negro de notable talento y erudito, pero seguramente se le admira por logros exiguos, como un loro que ha aprendido a decir varias palabras.”
El negro jamaiquino a quien Hume hace referencia en la nota es el primer escritor negro del que se tenga registro en el imperio británico: Francis Williams (1700-1771), quien habiendo impresionado con su talento al Duque de Montagu, gobernador de las islas Windward, viajó con su patrocinio a Inglaterra para cursar secundaria y, aparentemente, ingresar a la Universidad de Cambridge. El objetivo del duque era probar si un negro, recibiendo la debida educación, podía alcanzar el desarrollo intelectual de un blanco. Williams establecería su reputación como poeta de versos en latín, en Londres, y tras su regreso a Jamaica, fundaría una escuela para enseñar escritura, latín y matemáticas.