Categoría: Antiguas Ciudades

  • Gran Zimbabue, la mayor estructura de piedra pre-colonial del África Subsahariana, construida en el siglo XI

    Gran Zimbabue, la mayor estructura de piedra pre-colonial del África Subsahariana, construida en el siglo XI

    A pesar de la imagen tradicional que tenemos del África Subsahariana previa a la colonización, no todo eran poblados de chozas.

    n realidad existen numerosos yacimientos de antiguas ciudades construidas en materiales no tan perennes, como el ladrillo y la piedra. Quizá la más destacada de todas sea el Gran Zimbabue, por dos razones: en primer lugar se trata de una de las más antiguas (la segunda después de la sudafricana Mapungubwe), y en segundo lugar es la más grande estructura de piedra pre-colonial erigida en el continente al sur del ecuador.

    Lo que queda de ella está situado a unos 39 kilómetros de Masvingo, al sureste del actual país de Zimbabue (que precisamente significa grandes casas de piedra) y a una altitud de 1.140 metros. A esa altitud constituía una protección natural contra la enfermedad del sueño, ya que la mosca tsetsé habita en zonas más bajas.

    La arqueología situa la fundación del asentamiento en el siglo IV, mientras que la ciudad de piedra cuyos restos se pueden contemplar hoy día dataría del siglo XI d.C., extendiéndose los trabajos de construcción hasta el siglo XIV.

    No se conoce exactamente la identidad de quienes la levantaron. Existen varias hipótesis, siendo la más popular la que la atribuye a los modernos Shona, un grupo de pueblos bantú relacionado con el antiguo reino de Monomotapa o Mutapa. Sus ruinas pétreas se esparcen por un área de unos 7 kilómetros cuadrados y, en su mayor apogeo, Gran Zimbabue llegó a tener unos 18.000 habitantes.

    En primer término el Complejo de la Colina, al fondo la Gran Cerca / foto Janice Bell en Wikimedia Commons
    En primer término el Complejo de la Colina, al fondo la Gran Cerca / foto Janice Bell en Wikimedia Commons

    Vicente Pegado, el capitán de la guarnición portuguesa de la cercana Sofala, la describía así en 1531:

    Entre las minas de oro del interior y entre los ríos Limpopo y Zambezi hay una fortaleza construida con piedras de un tamaño sorprendente, y que parecen no estar unidas con mortero…Está rodeada de colinas sobre las que hay otras similares en el sentido que carecen de mortero, y una de ellas es una torre de más de 22 metros de altura. Los nativos llaman a estos edificios Symbaoe, que según su lengua significa palacio.

    La ciudad se compone de tres áreas que se conocen como el Conjunto de la Colina, el Conjunto del Valle y la Gran Cerca. De todos ellos el Conjunto de la Colina es el más antiguo, para el que la arqueología arroja un registro de ocupación desde el siglo IX al XIII. Aquí es donde se encuentra la Cerca Este, el lugar en que se hallaron las ocho Aves de Zimbabue, la escultura del pájaro que hoy es el emblema nacional del país. Estos estaban originalmente tallados en la parte superior de grandes monolitos de piedra, algunos de los cuales todavía son hoy visibles. Sus muros alcanzan los 5 metros de altura.

    Gran Zimbabue en el mapa de Ortelius de 1570 (como Simbaoe) / foto Ulamm en Wikimedia Commons
    Gran Zimbabue en el mapa de Ortelius de 1570 (como Simbaoe) / foto Ulamm en Wikimedia Commons

    El Conjunto del Valle habría sido ocupado entre los siglos XIV y XVI, y muestra numerosos restos de construcciones menores. La Gran Cerca fue habitada entre los siglos XIII y XV y consta de dos anillos amurallados, siendo el interior el más antiguo. El exterior alcanza los 11 metros de altura y los 250 de longitud. Entre ambos está la Torre Cónica, que se elevaba hasta los 9 metros de altura por 5 y medio de diámetro. Dentro de la Gran Cerca se han encontrado hasta ahora más de 300 estructuras.

    Algunos investigadores creen que las tres áreas son el resultado de las obras realizadas por sucesivos reyes, que fueron trasladando el centro del poder desde las colinas hasta el valle. Otros opinan que cada una respondía a una función diferente: el Conjunto de la Colina sería un complejo religioso, el Conjunto del Valle el lugar residencial de los ciudadanos, y la Gran Cerca el palacio real.

    La torre cónica (ahora de solo 7 metros de altura, destruida por cazadores de tesoros) / foto amanderson2 en Wikimedia Commons
    La torre cónica (ahora de solo 7 metros de altura, destruida por cazadores de tesoros) / foto amanderson2 en Wikimedia Commons

    La ciudad fue abandonada alrededor del año 1450, aunque no se sabe exactamente la razón. Pudo ser por el declive del comercio y el traslado de los centros de intercambio más al norte, el agotamiento del oro, o quizá la inestabilidad política y la escasez de alimentos y agua debida a cambios climáticos.

    Según la tradición Nyatsimba Mutota había sido enviado al norte en busca de recursos. El sería quien fundó el reino de Monomotapa en torno a 1430, un estado que prosperó como centro comercial hasta principicios del siglo XVII, basado en la extracción de oro de los ríos. Hasta que éste se agotó nuevamente y llegaron los portugueses en 1629.

    La primera noticia que aparece en las fuentes europeas sobre Gran Zimbabue es una carta dirigida por el explorador Diogo de Alcáçova al rey de Portugal en 1506. En 1538 Joao de Barros menciona una descripción del lugar obtenida de mercaderes árabes que comerciaban en la zona. Para entonces el lugar ya estaba deshabitado y los portugueses lo ignorarían durante lustros por su escaso valor.

    El Complejo de la Colina de Gran Zimbabue / foto Fanny Schertzer en Wikimedia Commons
    El Complejo de la Colina de Gran Zimbabue / foto Fanny Schertzer en Wikimedia Commons

    Las ruinas fueron redescubiertas en 1867 por el cazador Adam Render quien, cuatro años más tarde, se las mostraría a Karl Mauch, un explorador y geógrafo alemán que creyó ver en ellas una réplica del palacio de la reina de Saba en Jerusalén.

    Las primeras investigaciones en el lugar fueron realizadas por J. Theodore Bent con financiación de Cecil Rhodes y la Real Sociedad Geográfica británica. Bent concluyó que la ciudad era obra de fenicios o alguna tribu semítica de origen árabe.

    Uno de los pájaros tallados encontrados en Gran Zimbabue / foto Brian.gratwicke en Wikimedia Commons
    Uno de los pájaros tallados encontrados en Gran Zimbabue / foto Brian.gratwicke en Wikimedia Commons

    Habría que esperar hasta las excavaciones arqueológicas de 1905 realizadas por David Randall-MacIver para que la teoría del origen bantú comenzase a tomar forma. Gertrude Caton-Thompson en 1929 confirmaría la hipótesis aunque apuntando una posible influencia árabe en las torres. En los años 60 y 70 el gobierno de Rodesia (el estado colonial precursor del actual Zimbabue) censuraba cualquier intento de atribuir las construcciones a personas no blancas. Hoy en día las últimas investigaciones han confirmado la autoría de las contrucciones por los ancestros del pueblo Shona.

    Es más, de los restos hallados en las excavaciones (alfarería China, monedas árabes, objetos de cristal y abalorios) se argumenta que la ciudad pudo formar parte de una red de intercambios comerciales que se extendía hasta China.

    Gran Zimbabue está considerado el santuario nacional del país.

    Fuentes: Introduction to the History of African Civilization: Precolonial Africa (C. Magbaily Fyle) / The Silence of Great Zimbabwe (Joost Fontein) / Great Zimbabwe Ruins / Wikipedia

  • Antiguas ciudades africanas destruidas por Europeos: Loango

    Antiguas ciudades africanas destruidas por Europeos: Loango

    La ciudad de Loango en el área del Congo / Angola está representa en otro dibujo de mediados del año 1600. Una vez más, una gran ciudad planificada en disposición lineal, que se extiende por varios kilómetros y completamente rodeada de murallas, rebosante de comercio.

    loango2 El complejo sólo del rey tenía una milla y media de recinto con patios y jardines. Los habitantes de Loango habían utilizado las matemáticas no sólo con fines aritméticos sino también para cálculos astrológicos. Utilizaron matemáticas avanzadas, álgebra lineal.

    Vida en Loango
    Escena de vida cotidiana en Loango, Corte del rey N’Gangue M’voumbe Niambi, (Description of Africa (1668) by Olfert Dapper)

    El hueso de Ishango del Congo es una calculadora de hace unos 25 000 años. «Las llamadas inscripciones del hueso Ishango constan de dos columnas. Tanto los números de la columna izquierda como los de la derecha son todos números impares (9, 11, 13, 17, 19 y 21). Los números de la columna izquierda son todos los números primos comprendidos entre 10 y 20, mientras que los de la columna derecha consisten en 10 + 1, 10 – 1, 20 + 1 y 20 – 1.

    Los números de cada una de estas columnas suman 60, y la sumatoria de los números de la columna central es 48. Ambos resultados son múltiplos de 12, lo que vuelve a sugerir la existencia de un entendimiento de la multiplicación y la división. » Fuente: Fundación Ta Neter. Está expuesto a la vista en un museo en Bélgica. – Extracto de «Agenda Áfricana» por PD Lawton.

    La bonita ciudad de Loango fue destruída por cazadores de fortunas europeos, pseudo-misioneros y otros tipos de libre filibusteros.

    «En el ámbito textil, la telas congoleñas también fueron muy distinguidas. Varios escritores europeos de los siglos XVI y XVII escribieron sobre las delicadas artesanías de los pueblos que vivían al este del Congo y las regiones adyacentes que fabricaron damascos, sarcenets, rasos, tafetán, telas de tissue y terciopelo. El profesor DeGraft-Johnson hizo esta curiosa observación: «Sus brocados, altos y bajos, eran mucho más valiosos que los italianos.»

    Sobre la metalurgia congoleña de la Edad Media, un erudito moderno escribió que: «No hay duda sobre la existencia de un experto arte metalúrgico en el antiguo Kongo. . . Los Bakongo eran conscientes de la toxicidad de los vapores de plomo. Idearon métodos preventivos y curativos, tanto farmacológicos (dosis masivas de papaya y aceite de palma) y mecánicos (ejerciendo presión para liberar el tracto digestivo) para combatir el envenenamiento por plomo «.

  • Antiguas ciudades africanas destruidas por los Europeos: Kilwa

    Antiguas ciudades africanas destruidas por los Europeos: Kilwa

    En 1331, Ibn Batouta, describió la ciudad tanzana de Kilwa, en el Zanj, pueblo de habla swahili, de la siguiente manera «una de las ciudades más bellas y bien construidas del mundo, toda ella está elegantemente construida». En sus ruinas se encuentran arcos “góticos” y un intrincado trabajo en piedra, ejemplos de una arquitectura exquisita. Kilwa se remonta al siglo IX y estuvo en su apogeo en los siglos XIII y XIV. Este puerto africano internacional acuñó su propia moneda desde los siglos XI al XIV. Los restos de objetos encontrados en ella la vinculan a España, China, Arabia y a la India. Los habitantes, arquitectos y fundadores de esta ciudad no eran árabes y la única influencia que tuvieron de los europeos, en la forma de los portugueses, fue sólo para marcar el inicio de la decadencia, probablemente a través de la viruela y la gripe «- Fuente:. Centro del Patrimonio Mundial de la UNESCO, extracto de la «Agenda Áfricana» por PD Lawton

    En 1505 las fuerzas portuguesas destruyeron y quemaron las ciudades swahili de Kilwa y Mombasa.

    La siguiente imagen muestra una reconstrucción artística del palacio del sultán en Kilwa en el 1400, seguida de otras fotografías de sus ruinas.

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  • Antiguas ciudades africanas destruidas por los Europeos: Kumasi

    Antiguas ciudades africanas destruidas por los Europeos: Kumasi

    Kumasi fue la capital del reino de Ashanti, siglo X al XX. Los grabados de la vida en Kumasi muestran casas, a menudo de 2 pisos, edificios cuadrados con techos de paja, con habitaciones familiares dispuestas alrededor de un patio. El complejo del Palacio Manhyia dibujado en otro boceto era similar a un castillo normando, sólo que más elegante en su arquitectura.

    «Estas casas de 2 pisos con techo de paja del Reino de Ashanti eran de madera enmarcada y las paredes estaban construidas con tejas y yeso. Siempre había un árbol en el patio, que era el punto central de la unidad familiar. El Árbol de la Vida era el altar para las ofrendas de la familia a Dios, Nyame. Se ponía una cacerola de cobre amarillo en las ramas del árbol en la que se colocaban las ofrendas. Esta era la misma en cada patio de cada casa, templo y palacio. Los representantes y funcionarios del Rey trabajaban en edificios de lados abiertos. La finalidad era para que todo el mundo fuera bienvenido a ver lo que estaban haciendo.

    «Las casas de la ciudad de Kumase tenían baños en la planta alta en 1817. En el año 1800 la ciudad estaba documentada en dibujos y fotografías. Con paseos y plazas públicas, vidas cosmopolitas, en todas partes una gran cantidad de exquisita arquitectura impecable y ordenada, historia, prosperidad y vida muy moderna «- PD Lawton, AfricanAgenda.net

    Winwood Reade describió su visita al Palacio Real Ashanti de Kumasi en 1874: «Fuimos a la casa del Rey, que se compone de muchos patios, cada uno rodeado de alcobas y terrazas, y que tiene dos portones o puertas, de manera que cada jardín fuera una pasaje.. . Pero la parte del palacio  que daba frente a la calle era una casa de piedra, de estilo morisco. . . con un techo plano y un parapeto, y suites de apartamentos en el primer piso. Fue construida por albañiles Fanti hace muchos años. Las habitaciones de arriba me recuerdan a Wardour Street. Cada una era como una perfecta pieza de tienda de viejas curiosidades. Libros en muchos idiomas, cristal de Bohemia, relojes, platería, muebles antiguos, alfombras persas, alfombras Kidderminster, cuadros y grabados, innumerables cofres y arcas. Una espada con una inscripción de la reina Victoria al Rey de Ashanti. Un ejemplar del Times del 17 de octubre de 1843. Junto con todo esto había muchos  ejemplares de artesanía Morisca y Ashanti. «- Robin Walter

    La hermosa ciudad de Kumasi fue volada, destruida por el fuego y saqueada por los británicos a finales del siglo XIX.

  • Antiguas ciudades africanas destruidas por los Europeos: Tombuctú

    Antiguas ciudades africanas destruidas por los Europeos: Tombuctú

    ¿Sabías que en el siglo XIV la ciudad de Tombuctú en el África Occidental era cinco veces más grande que la ciudad de Londres, y fue la ciudad más rica del mundo?
    Hoy, Tombuctú es 236 veces menor que la de Londres. No tiene nada de una ciudad moderna. Su población es dos veces menos que hace 5 siglos, empobrecida con mendigos y sucios vendedores ambulantes. La ciudad en sí es incapaz de conservar sus monumentos en ruinas del pasado y sus archivos.

    Volviendo al siglo XIV, los 3 lugares más ricos de la tierra fueron China, Irán / Irak, y el imperio de Malí en África Occidental. De estos 3 el único que todavía era independiente y próspero fue el Imperio de Malí. China y todo el Medio Oriente fueron conquistados por las tropas mongoles de Gengis Khan que asolaron, saquearon, y violaros los lugares.
    El hombre más rico en la historia de la Humanidad, Mansa Musa, fue el emperador del Imperio de Malí en el siglo XIV que abarcaba lo que hoy en día Malí, Senegal, Gambia y Guinea.

    En el momento de su muerte en 1331, Mansa Musa valía el equivalente a 400 mil millones de dólares. En ese momento el imperio de Malí producía más de la mitad del suministro mundial de sal y oro.

    Cuando Mansa Musa fue en peregrinación a La Meca en 1324, llevó tanto oro, y lo gastaron tan generosamente que el precio del oro cayó por diez años. Lo acompañaron 60.000 personas.

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    Representaciones de la ciudad de Tombuctú, en el siglo XIX.

    Él fundó la biblioteca de Tombuctú, y los famosos manuscritos de Tombuctú que abarcan todas las áreas de conocimiento del mundo fueron escritos durante su reinado.
    Los testigos de la grandeza del imperio de Malí llegaron de todas partes del mundo. «Sergio Domian, un erudito italiano en arte y arquitectura, escribió lo siguiente acerca de este período: ‘Así se sentaron las bases de una civilización urbana. En el apogeo de su poder, Malí tenía al menos 400 ciudades, y el interior del Delta del Níger estaba muy densamente poblada».
    La ciudad maliense de Tombuctú tenía una población en el siglo XIV de 115.000 habitantes – 5 veces más grande que el Londres medieval.
    El National Geographic describió recientemente Tombuctú como el París del mundo medieval, a causa de su cultura intelectual. Según el profesor Henry Louis Gates, 25.000 estudiantes universitarios estudiaron allí.

    «Muchas antiguas familias del África Occidental poseen colecciones de las bibliotecas privadas que se remontan a cientos de años. Las ciudades mauritanas de Chinguetti y Oudane tienen un total de 3.450 libros medievales escritos a mano. Puede que haya otros 6.000 libros aún que se conservan en la otra ciudad de Walata. Algunos se remontan al siglo VIII antes de nuestra era. Hay unos 11.000 libros en colecciones privadas en Níger.
    Finalmente, en Tombuctú, Mali hay cerca de cerca de 700.000 libros sobrevivientes. Están escritos en Mande, Suqi, Fulani, Tombuctú y Sudani. El contenido de los manuscritos incluye matemáticas, medicina, poesía, leyes y astronomía. Esta obra fue la primera enciclopedia en el siglo XIV antes de que los europeos tuvieran la misma idea más adelante en el siglo XVIII, 4 siglos después.

    Una colección de mil seiscientos libros fue considerada una pequeña biblioteca para un estudioso de África Occidental del siglo XVI. El profesor Ahmed Baba de Tombuctú se sabe que consideraba que él tenía la biblioteca más pequeña de todos de sus amigos; y sólo tenía 1.600 volúmenes.

    En cuanto a estos viejos manuscritos, Michael Palin, en su serie de televisión Sahara, dijo que el imán de Tombuctú «tiene una colección de textos científicos que muestran claramente los planetas que circundan al sol. Su origen se remonta a cientos de años. . . Hay evidencias convincentes de que los eruditos de Tombuctú sabían mucho más que sus contrapartes en Europa. En el siglo XV en Tombuctú los matemáticos sabían acerca de la rotación de los planetas, conocían los detalles de los eclipses, sabían cosas que tuvimos que esperar de 150 a casi 200 años para conocerlas en Europa cuando Galileo y Copérnico llegaron a esos mismos cálculos a pesar de ser tiempos muy difíciles para ello.

    La antigua capital maliense de Niani tenía un edificio del siglo XIV llamado la Sala de Audiencia. Estaba coronado por una cúpula, adornado con arabescos de colores llamativos. Las ventanas del piso superior estaban chapadas con madera y enmarcadas en plata; las de la planta baja estaban también chapadas con madera y enmarcadas en oro.
    Los marineros malienses llegaron a América en el 1311 de nuestra era, 181 años antes que Colón. Un erudito egipcio, Ibn Al-Fadl Umari, publicó este dato en algún momento alrededor de 1342. En el décimo capítulo de su libro, hay un relato de dos grandes travesías marítimas ordenadas por el predecesor de Mansa Musa, un rey que heredó el trono maliense en 1312. Este rey navegante no es nombrado por Al-Umari, pero los escritores modernos lo identifican como Mansa Abubakari II.(Extracto del libro de Robin Walker «Cuando gobernábamos’)

    Todos estos acontecimientos sucedían en mismo período en que Europa como continente se sumió en la Edad Oscura, devastado por la peste y el hambre, con su gente aniquilándose unos a otros por razones religiosas y étnicas.
    Juntos algunas representaciones de la ciudad de Tombuctú, en el siglo XIX.

    Por: Mawuna Remarque KOUTONIN
    November 1st, 2014 at 5:33 pm.

    Portada

  • Antiguas ciudades africanas destruidas por los Europeos: Benin

    Antiguas ciudades africanas destruidas por los Europeos: Benin

    Cuando los turistas visitan el África subsahariana, a menudo se preguntan «¿Por qué no hay edificios históricos o monumentos?»

    La razón es simple. Los europeos han destruido la mayor parte de ellos. Sólo hemos dejado dibujos y descripciones de los viajeros que han visitado los lugares antes de las destrucciones. En algunos lugares, las ruinas son todavía visibles. Muchas ciudades han sido abandonadas hasta la ruina cuando los europeos trajeron enfermedades exóticas (la viruela y la gripe) que comenzaron a extenderse y matando gente. Las ruinas de esas ciudades aún están ocultas. De hecho la mayor parte de la historia de África está todavía enterrada bajo tierra.

    En este este, compartiremos trozos de información sobre África antes de la llegada de los europeos, las ciudades destruidas y las lecciones que podríamos aprender como africanos que somos para el futuro.

    La recopilación de hechos relacionados con el estado de las ciudades africanas antes de su destrucción ha sido realizada por Robin Walker, un panafricanista y distinguido historiador que ha escrito el libro «Cuando gobernábamos», y por PD Lawton, otro gran panafricanista, que editará un próximo libro titulado «Agenda Africana».

    Todas las citas y extractos mencionados más adelante son de los libros de Robin Walker y PD Lawton. Les recomiendo que compren el libro de Walker ‘Cuando gobernábamos’ para obtener un informe completo de la belleza del continente antes de su destrucción. Pueden obtener más información sobre el trabajo de PD Lawton visitando su blog: AfricanAgenda.net
    Robin Walter y PD Lawton han citado muy fuertemente a otro gran panafricanista, Walter Rodney, quien escribió el libro «Cómo Europa subdesarrolló a África. La Información adicional está en el canal de YouTube ‘dogons2k12: Ruinas históricas africanas, y en el trabajo de la Fundación Ta Neter.

    Muchos dibujos son del libro Ciudades y pueblos de África antes de la Conquista Europea por Richard W. Hull, publicado en 1976. Ese libro solo disipa la visión estereotipada de los africanos que viven en lo que parecen simples y primitivas aglomeraciones, dispersos sin que parezcan apreciar la planificación y el diseño.

    De hecho, a finales del siglo XIII, cuando un viajero europeo se encontró con el La Gran Ciudad de Benin en el África Occidental (actual Nigeria, el Estado de Edo), escribió lo siguiente:

    Ciudad de Benin
    Esta es una vista de la ciudad de Benin en 1891 antes de la conquista británica. H. Ling Roth, Gran Benin, Barnes y Noble reimpresión. 1968.

    «La ciudad parece ser muy grande. Cuando entras en ella, te encuentras en una enorme y amplia calle, sin pavimentar, que parece ser siete u ocho veces más grande que la calle Warmoes en Amsterdam … El palacio de los Reyes es un conjunto de edificios que ocupan tanto espacio como la ciudad de Harlem, y que está amurallado. Existen numerosos apartamentos para los ministros del Príncipe y elegantes galerías, la mayoría de las cuales son tan grandes como las de la Bolsa de Amsterdam. Están apoyadas por pilares de madera revestidos con cobre, en donde se representan sus victorias, y cuidadosamente mantenidos muy limpios. La ciudad se compone de treinta calles principales, muy rectas y de 120 metros de ancho, además de una infinidad de pequeñas calles que se cruzan. Las casas están cerca una de la otra, dispuestas en orden. Este pueblo no es de ninguna manera inferior a los holandeses en cuanto a higiene; lavan y frotan sus casas tan bien que están tan pulidas y brillantes como un espejo». (Fuente: Walter Rodney,»Cómo Europa subdesarrolló a África, pg 69).

    Lamentablemente en 1897, la ciudad de Benin fue destruida por las fuerzas británicas al mando del almirante Harry Rawson. La ciudad fue saqueada, volada y destruida por las llamas. Una colección de los famosos Bronces de Benin se encuentra ahora en el Museo Británico de Londres. Parte de los 700 bronces robados por las tropas británicas se vendieron de nuevo a Nigeria en 1972.

    Esta es otra descripción sobre la gran ciudad de Benin en referencia a las murallas de la ciudad «Éstas se extienden unos 16.000 kilometros en total, en un mosaico de más de 500 fronteras de asentamientos interconectados. Cubren 6.500 kilómetros cuadrados y fueron excavados por los Edo. En total, son cuatro veces más que la Gran Muralla China, y se utilizó cien veces más material que en la Gran Pirámide de Keops. Se tardó un tiempo estimado de 150 millones de horas de excavaciones para poder construir, y es quizás el fenómeno arqueológico único más grande del planeta.».Fuente: Wikipedia, Arquitectura de África» Fred Pearce Thel New Scientist 11/09/99.

    Por: Mawuna Remarque KOUTONIN
    November 1st, 2014 at 5:33 pm.
    Traduccion Historiadeafrica.com

  • Tombuctú la ciudad de los 333 santos

    Tombuctú la ciudad de los 333 santos

    TombuctuTombuctú es una ciudad apodada “la de los 333 santos” cercana al río Níger (a 7 km de distancia del río), en la región del mismo nombre, en la República de Malí. Con sus 35.657 habitantes es la localidad más poblada de la región y la decimotercera ciudad del país.

    Su situación geográfica hace de la ciudad un punto de encuentro entre África occidental y las poblaciones nómadas beréberes y los árabes del norte. Tiene una larga historia como puesto avanzado de comercio, e intersección de la ruta comercial transahariana de norte a sur.
    Se hizo próspera por Mansa Musa, rey del Imperio de Malí quien se anexionó pacíficamente la ciudad en 1324. Es el hogar de la prestigiosa Universidad de Sankore y de otras madrazas, y fue capital intelectual y espiritual y centro para la propagación del islam en toda África durante los siglos XV y XVI. Sus tres grandes mezquitas, Djingareyber, Sankore y Sidi Yahya, recuerdan la edad de oro de Tombuctú. Aunque continuamente restaurados, estos monumentos están hoy bajo la amenaza de la desertificación, ya que la ciudad está principalmente hecha de barro.  Según algunos estudios, Tombuctú ha tenido una de las primeras universidades del mundo. Estudiosos locales y coleccionistas todavía cuentan con una impresionante colección de antiguos textos griegos de aquella época, y en el siglo XIV fueron escritos y copiados importantes libros, estableciendo la ciudad como centro de una importante tradición escrita en África.

    Existen varias teorías para intentar explicar el origen del nombre de la ciudad. Por un lado, se cree que se compone de la unión de tin, que significa «lugar» y buktu, que es el nombre de una vieja mujer maliense conocida por su honestidad y que vivió en la región. Los tuareg y otros viajeros confiaban a esta mujer todas sus pertenencias que no tenían uso en su viaje de regreso al norte. Así, cuando éstos volvían a casa y les preguntaban dónde había dejado sus pertenencias, estos respondían que las habían dejado en Tin Buktu, esto es «el lugar donde vive Buktu».
    Para Abderrahamne es-Saadi la ciudad recibe ese nombre debido a que, en sus orígenes, algún bien fue custodiado por un esclavo llamado Buctú, que significa «de Essuk» (una localidad del norte de Malí, a menudo referida por historiadores árabes como Tadmakka). Por tanto, en bereber significaría «el lugar de Buctú». Otra teoría de René Basset propone que proviene del idioma bereber antiguo, en el que buqtsignifica «lejos», así que Tin-Buqt significaría «un lugar lejano», como lejana es una localidad en el desierto del Sahara. Para otros, como el explorador alemán del siglo XIX Heinrich Barth, la segunda parte del nombre proviene de la palabra árabe nekba, que significa «duna», significando por tanto «lugar de dunas» o «depresión entre las dunas».

    Orígenes

    La ciudad fue fundada por los tuareg en torno al año 1100 por su proximidad al río Níger como un puesto de comercio, durante la dinastía Mandinga. Tombuctú era el punto de entrada al desierto del Sahara en la ruta transahariana de norte a sur; aquí se reunían los camelleros tuareg, quienes comerciaban con la sal que traían del Mediterráneo y la intercambiaban por oro, fruta y pescado con las tribus negras que poseían dichos bienes en abundancia. La procedencia del oro con el que comerciaban estas tribus era desconocida, y sumado al hecho que no se permitía la entrada a la ciudad a los no musulmanes, originó las más diversas leyendas sobre la ciudad. Un antiguo proverbio de Malí decía:
    “El oro viene del sur, la sal del norte y el dinero del país del hombre blanco; pero los cuentos maravillosos y la palabra de Dios sólo se encuentran en Tombuctú”. (Proverbio maliense)
    Durante el siglo XIV se construyó la muralla actual y la primera mezquita. Tuvo su mayor esplendor durante el reinado de los Askia (1493-1591), con más de 100.000 habitantes de diversas etnias: bereberes, árabes, mauritanos, bambas y tuareg. Los habitantes estaban organizados en barriadas, donde se agrupaban, pero manteniendo activa la ciudad mediante el comercio.
    Pero Tombuctú también fue famosa por su cultura, convirtiéndose en un centro de estudios islámicos, gracias a las diversas facultades de su universidad. Cuando la prohibición a los no musulmanes fue levantada, durante la época francesa, llegaron a su Universidad letrados y científicos de distintos lugares, españoles, egipcios, persas y de todo el Magreb.

    Tiempo del Imperio de Malí

    En 1312, Mansa Musa se convirtió en el rey del Imperio de Malí, y fue él quien convirtió a Tombuctú en un importante centro comercial y en un gran centro de estudios islámicos. Entonces, el imperio controlaba gran parte de las rutas comerciales entre el oro del sur y la sal del norte; 12 años después se anexionó la ciudad y la potenció como punto de unión de estas rutas comerciales. Mansa Musa fue un devoto musulmán, interesado en expandir la influencia del islam. En sus primeros años como rey, envió a ciudadanos malienses a estudiar en las universidades marroquíes; al final de su reinado estos ciudadanos volvieron y establecieron sus propios centros de estudio en la ciudad. Como musulmán, ordenó la construcción de grandes mezquitas (entre ellas la mezquita de Djingareyber en Tombuctú, por el arquitecto granadino Abu Haq Es Saheli en 1326), bibliotecas y madrazas. Aunque el Imperio Malí perdió el control sobre la región en el siglo XV, la ciudad permaneció como el mayor centro islámico del África subsahariana.

    Tiempo del Imperio songhay

    Si bien bajo el control de Mansa Musa la ciudad prosperó, la edad dorada de Tombuctú llegó bajo el dominio del Imperio songhay; la ciudad fue conquistada por las tropas enviadas por el rey Sonni Alí Ber en 1468. Pese a que era musulmán, no era muy popular, así que fue derrocado por Askia Mohamed, un devoto musulmán que utilizó a los estudiantes como asesores legales sobre cuestiones éticas. Bajo su reinado, la religión y el estudio ocuparon de nuevo un lugar principal en el imperio Songhay. Estudiantes de todo el mundo islámico acudieron a la Universidad de Sankore (una de las primeras de África) y a las 180 madrazas con las que contaba la ciudad, donde se enseñaba teología, ley islámica y literatura. Unos 25.000 alumnos estudiaron un riguroso programa académico.

    Fuentes: wikipedia

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