La historia de Colombia ha sido marcada por episodios de injusticia, exclusión y segregación, muchos de los cuales han dejado profundas cicatrices en la memoria colectiva. Uno de estos episodios es el caso de Juan José Nieto Gil, el único presidente negro de Colombia, cuya vida y contribuciones han sido deliberadamente ocultadas de la historia oficial del país. Este artículo busca explorar la vida, obra y legado de Nieto Gil, así como las razones detrás de su exclusión de los relatos históricos dominantes.
Un Nacimiento Humilde y una Vida de Superación
Juan José Nieto Gil nació el 24 de junio de 1805 en Cibarco, en el actual departamento del Atlántico, Colombia. Fue hijo de Tomás Nicolás Nieto y Benedicta Gil, una pareja humilde que, según el historiador Orlando Fals Borda, recibió a su hijo al pie de un árbol de matarratón. Nieto Gil creció en un contexto de profundas desigualdades sociales y raciales, características de la Colombia del siglo XIX.
Nieto Gil fue autodidacta, lo que le permitió sobresalir en una sociedad que restringía el acceso a la educación a las élites blancas. A lo largo de su vida, desarrolló un fuerte compromiso con los ideales liberales, convirtiéndose en un ferviente defensor de la igualdad y la justicia social. Fue también masón, lo que reflejaba su interés por los principios de libertad, fraternidad e igualdad.
Carrera Política y Militar
Nieto Gil inició su carrera política en 1839 como diputado de la Cámara Provincial de Cartagena. Durante este periodo, participó en la guerra civil conocida como la «Guerra de los Supremos», donde demostró su liderazgo militar y político. Sin embargo, esta participación le costó la cárcel y posteriormente el exilio durante cinco años en Kingston, Jamaica. En 1847 regresó a Cartagena, donde retomó su carrera política y militar.
En julio de 1851, asumió el cargo de gobernador de la provincia de Cartagena. Durante su gestión, mostró un fuerte compromiso con la defensa de los derechos de las comunidades afrodescendientes y las clases populares, lo que le ganó tanto admiradores como detractores. Su enfoque progresista lo llevó a convertirse en una figura central del liberalismo colombiano.
El Contexto de su Presidencia
La presidencia de Juan José Nieto Gil tuvo lugar en un momento de gran inestabilidad política en Colombia. En 1860, Nieto Gil, como gobernador del estado de Bolívar, proclamó la separación de este del resto de la Confederación Granadina, liderada por el gobierno conservador y centralista de Mariano Ospina Rodríguez. Esta decisión fue tomada en apoyo al general liberal Tomás Cipriano de Mosquera, quien lideraba una revolución desde el sur del país.
En noviembre de 1860, Nieto Gil asumió el control político y militar del norte de Colombia. Finalmente, el 25 de enero de 1861, ante la ausencia de Mosquera, Nieto Gil se autoproclamó Presidente de los Estados Unidos de la Nueva Granada, con la intención de mantener la estabilidad hasta que Mosquera asumiera el poder. Aunque su mandato fue breve, de solo seis meses, Nieto Gil dejó una marca significativa en la política nacional.
El Racismo y la Exclusión de la Historia Oficial
A pesar de su relevancia histórica, el nombre de Juan José Nieto Gil ha sido borrado de la historia oficial de Colombia. En los textos escolares, su presidencia se omite, y los historiadores conservadores suelen minimizar su importancia. Una de las principales razones de esta exclusión parece ser su condición de hombre negro y costeño, en un país donde las élites blancas han dominado históricamente el poder político y cultural.
Orlando Fals Borda, un destacado historiador colombiano, jugó un papel crucial en el redescubrimiento de Nieto Gil. Durante sus investigaciones en las mazmorras del Palacio de la Inquisición en Cartagena, Fals Borda encontró un retrato de Nieto Gil, que había sido relegado al olvido y se encontraba en condiciones de deterioro. Este retrato fue restaurado, revelando la verdadera apariencia de Nieto Gil como un hombre de piel oscura. Sin embargo, la restauración no fue bien recibida por las élites cartageneras, lo que refleja el profundo racismo que persiste en algunos sectores de la sociedad colombiana.
Legado Literario y Cultural
Además de su carrera política, Juan José Nieto Gil fue un pionero en la literatura colombiana. Escribió varias novelas, entre ellas La hija de Calamar y Los moriscos, que lo convierten en el primer novelista del país. Aunque muchas de sus obras se han perdido, su contribución al desarrollo de la literatura colombiana es innegable. Estas novelas reflejan su preocupación por los problemas sociales y su compromiso con los ideales de justicia y libertad.
El Reconocimiento Tardío
En los últimos años, ha habido esfuerzos por reivindicar la memoria de Juan José Nieto Gil. En el Museo Histórico de Cartagena, su retrato ha sido expuesto como el único presidente negro de Colombia, aunque sigue enfrentando resistencia por parte de ciertos sectores. Asimismo, su figura ha sido objeto de investigaciones académicas y proyectos culturales que buscan rescatar su legado.
A pesar de estos avances, Nieto Gil sigue ausente en la galería oficial de presidentes de Colombia y en muchos textos históricos. Su exclusión subraya la necesidad de una revisión crítica de la historia nacional, que reconozca las contribuciones de todos los sectores de la sociedad, independientemente de su raza o región.
Reflexiones Finales
La historia de Juan José Nieto Gil es un recordatorio de cómo el racismo y los prejuicios pueden distorsionar la memoria histórica de una nación. Su vida y obra representan una lucha por la igualdad y la justicia que sigue siendo relevante en el contexto actual de Colombia. Reconocer su legado no solo es un acto de justicia histórica, sino también un paso hacia la construcción de una sociedad más inclusiva y equitativa.
Referencias
- Fals Borda, Orlando. Historia doble de la Costa. Bogotá: Carlos Valencia Editores, 1981.
- Guillén, Gonzalo. «Colombia borró de la historia a su único presidente negro». El Nuevo Herald, 2020.
- Cabrera, Gabriel. «Un presidente borrado de la historia». El País (Cali), 23 de agosto de 1998.
- Restrepo, Sofía. Entrevista sobre la colección de presidentes del Banco de la República. El Nuevo Herald, 2020.
- Pécaut, Daniel. Orden y violencia en Colombia. Bogotá: Editorial Norma, 2001.